Elena Casero: "No es fácil ni agradable tener que descartar lo que ha escrito otra persona"

Elena Casero. Escritora y miembro del
Jurado del I Premio Internacional de
Novela Corta La Esfera

Cuando me propusieron formar parte del jurado del “I Certamen Internacional de Novela Corta La Esfera” me llevé una gran sorpresa ya que estaba preparando mi propia novela para enviarla al concurso. No es demasiado habitual que se convoquen concursos para novela corta, por lo que éste resultaba muy apetecible. Un concurso abierto a gente novel, y no tanto, en el que tienes la posibilidad de ver tu novela, ese documento que permanece guardado en el ordenador, convertido en algo tangible, en un libro de papel que, al fin y al cabo, es lo que deseamos todos los que escribimos.

Sin embargo, no me lo pensé demasiado y escogí la opción de ser jurado. Un reto increíble que ha durado varios meses.

Ha sido una experiencia muy gratificante de la que he aprendido mucho. Hemos leído una gran cantidad de novelas: unas mejores y otras, menos. Muchas en las que se ha notado el oficio y el bagaje de lecturas de quien las ha escrito. Otras, desafortunadamente, han sido enviadas sin excesivas correcciones, o sin haber leído las bases con detenimiento. Pero de todas ellas hemos intentado sacar lo mejor. No es fácil ni agradable tener que descartar lo que ha escrito otra persona, y más teniendo en cuenta que ese trabajo siempre se hace con gran ilusión y esfuerzo.

Desde mi punto de vista de escritora puedo ponerme en la piel de la persona que ha enviado su manuscrito. Puedo suponer la dedicación de tantas y tantas horas de pensar, tomar notas, desarrollar esa primera idea, darle forma hasta construir una historia, corregir, volver a leer, repasar una y otra vez hasta concluirla.

La decisión ha sido complicada. Las novelas que han llegado, según mi criterio, hasta la final han estado muy ajustadas, pero había que decidir y analizar por qué una gana y otras no. En las ganadoras, al igual que en las finalistas, se ha notado el oficio y el buen hacer de los escritores.

En definitiva, una ardua experiencia enriquecedora. Y un placer comprobar que hay tanta gente que necesita de la escritura para desarrollar su imaginación y su talento.

Artículo: +Elena Casero 

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